¿Que es tener una identidad personal?







Cuando el desarrollo del niño se produce en una familia armónica, y en una sociedad que lo acepta, lo apoya en sus progresos y en sus momentos difíciles, su salud mental se caracteriza por la capacidad para adaptarse al crecimiento y a las exigencias que lo rodean.
La adolescencia es descrita como una época en la que la persona busca, quiere llegar a ser alguien, pero no sabe cómo. Por esto, hace ensayos, que en ocasiones pueden ser mal vistos por la familia y la sociedad. Sin embargo, los adultos nos olvidamos que esos comportamientos son necesarios para la consolidación de la identidad. Entendemos por ésta, la sensación de continuidad y de ser uno mismo y de permitirle al individuo diferenciarse de los demás.
Ahora bien, ¿en qué momento podemos hablar de conductas de riesgo en las que se prolongue o se desvíe el desarrollo de esa identidad? Podríamos hablar de esta situación cuando observamos que esas parecen perpetuarse, acentuarse y aun desviarse por caminos que ya no representan ideales a alcanzar, sino que se convierten en una forma de vida, en la que se puede estar arriesgando la existencia. Por ejemplo, el uso de drogas, conductas antisociales, etcétera.
Por el contrario, una transición adecuada de la adolescencia permitirá al chico o a la chica encontrar "aquello" que andaba buscando, su identidad; lo cual le permitirá establecer una relación diferente con sus padres, con amigos, con intereses diversos pero definidos, por ejemplo, decidir qué quiere estudiar y elegir una pareja con la cual pueda compartir su vida.